Montalbán de Córdoba

Reordenación del entorno de la Plaza de Andalucía, limitado por la calle Eloy Vaquero, calle Iglesia y calle Ancha. Montalbán de Córdoba (Córdoba)

La plaza de Andalucía, ubicada en el centro del núcleo urbano de Montalbán de Córdoba, se inserta en una manzana cuyo diseño es anterior a los años 60, remodelado para albergar a la iglesia Santa María de Gracia, situándose también en este ámbito la sede del ayuntamiento y el teatro municipal.

La sobreelevación de la plaza respecto a las calles que la rodean, de acerados estrechos y abundante tráfico, dificulta el acceso a personas mayores o con movilidad reducida.

A fin de resolver esta situación, desde La Ciudad Amable y dentro de la iniciativa Espacio Habitable , cuya finalidad es la activación y mejora de la calidad ambiental y paisajística de un espacio público o secuencia urbana concreta, se presenta este proyecto de intervención con el que se pretende principalmente el desarrollo del ámbito en un solo nivel que permita la accesibilidad total.

Así, entre los objetivos del proyecto para el entorno de la plaza de Andalucía se recogen la movilidad sostenible y la accesibilidad universal, así como el fomento de un lugar de encuentro sociocultural para personas de todas las edades y la mejora de la calidad medioambiental.

Con la intervención se pretende un mayor acercamiento del diseño a una perspectiva universal y deseada por la vecindad, para lo que se ha contado con los datos extraídos de la grabación intensiva de la plaza durante una semana. El resultado son dos grandes ejes -Ayuntamiento-Iglesia y Teatro-Bar Plaza-, complementados por 7 recorridos prioritarios. Se definen además 3 áreas estanciales: frente al teatro, anexa a la Iglesia; en la calle Iglesia, que se peatonaliza; en la calle Eloy Vaquero, convertida en zona 10 con prioridad peatonal.

PROCESO. La centralidad del espacio tratado, tanto por su situación en el municipio como por aglutinar la sede del consistorio, equipamientos públicos y privados de interés colectivo, entidades bancarias o comercios lo convierten en un foco atractor para la población en general. Con esa percepción se realiza el análisis de la accesibilidad y la movilidad a nivel proyectual.

Aunque la convocatoria de La Ciudad Amable apuesta por un enfoque multidisciplinar como fórmula para enriquecer las propuestas, dotándolas de un carácter transversal, en este proyecto este aspecto no ha sido contemplado, careciendo de un equipo con estas características.

Se subraya la importancia de la participación ciudadana en la definición de la propuesta, puesto que los objetivos que se quieren conseguir con el desarrollo de la reordenación del ámbito son fruto de una participación colectiva cuyas conclusiones muestran las necesidades de los usuarios habituales del espacio público y la problemática que actualmente tienen para el uso y disfrute de la “plaza ”.

APORTACIONES. Como aportación del proyecto a la mejora de la calidad ambiental, y la habitabilidad del espacio subrayar la mejora de la accesibilidad en el ámbito, el rescate de dos tramos de viales de la primacía del tráfico rodado, la previsión de elementos de sombra y de bancos sombreados adecuados para el descanso y la estancia de personas con distintas condiciones de movilidad o edad.

A nivel del tratamiento de la superficie vegetada, la intervención propuesta incluye la remodelación de estas áreas con la tala de 8 de los 9 olmos de bola de gran porte, sustituidos por nuevas especies arbóreas, arbustivas así como plantas aromáticas y tapizantes.

La elección de los materiales se resuelve básicamente con pavimentos de hormigón prefabricado, baldosas de gres porcelánico, y mediante materiales catalíticos que contribuyen a la eliminación de contaminantes de la atmósfera, renunciando al uso de materiales pétreos locales.

CONCLUSIONES. Se destaca positivamente de este proyecto el especial interés manifestado por conseguir un espacio diseñado desde las aportaciones surgidas de la participación ciudadana, dirigidas al logro de la accesibilidad universal, rescatando dos tramos de calles del dominio del vehículo motorizado mediante actuaciones de peatonalización o de priorización peatonal, que junto al ámbito de la plaza han generado un espacio público usado por vecinos y vecinas para desplazamientos cotidianos, para el descanso, como lugar de reunión, o zonas improvisadas de juego, etc.

Sin embargo estas decisiones de diseño han perdido la oportunidad de verse apoyadas y enriquecidas por aspectos históricos, culturales, patrimoniales, etc. propios de la localidad, al carecer de cualquier tipo de investigación o procesos de documentación previos en estos ámbitos.

Aunque el proyecto aspira a crear un entorno con un marcado carácter medioambiental, decisiones como la tala del arbolado preexistente o la renuncia al empleo de materiales y técnicas constructivas locales no parecen apoyar esa pretensión. Frente al uso de productos locales, seleccionados en función de características inherentes a los mismos, adecuados a las condiciones climáticas locales, para el solado del nuevo espacio se opta por la tecnología incorporada en los materiales catalíticos. Echamos en falta un análisis comparado que determine los beneficios reales que aportan y que justifiquen su empleo, dado que la pavimentación tiene un peso económico muy relevante en un presupuesto que debe ser módico, según las premisas de La Ciudad Amable.

Se subraya la ausencia de referencias a las condiciones climáticas de la localidad, así como de un análisis de soleamiento que apoye la identificación de las necesidades y la ubicación más adecuada de las zonas de estancia y descanso en este espacio.