Nigüelas

La plaza amable. Plaza de la Iglesia, Nigüelas (Granada)

Situado en la Comarca granadina del Valle de Lecrín, el municipio de Nigüelas se emplaza a mitad de camino entre la capital y la costa, bajo el abrigo de Sierra Nevada. El lugar elegido para la intervención es la Plaza de la Iglesia, muy marcada culturalmente por los elementos que la rodean. La iglesia y el aljibe constituyen dos de las fachadas de esta plaza, configurada en varios niveles y habitualmente usada como aparcamiento, mermando con ello su calidad ambiental y la posibilidad de estancia para la población.

El proyecto pretende mejorar las condiciones del espacio para el peatón, liberándolo de vehículos y fomentando su uso y disfrute por la ciudadanía. Se propone actuar de forma puntual para mejorar determinadas áreas, delimitando claramente el espacio peatonal (plaza) del rodado (calle lindante), así como en el muro perimetral, en el que se incluye la presencia del agua, elemento muy vinculado con Nigüelas.

Los trabajos se centran en la remodelación de la fuente central existente y en la ejecución, en la esquina Sureste del muro, de una cascada de agua perceptible desde la zona inferior de las calles anexas. Se delimita la zona de aparcamiento de vehículos, evitando la actual posibilidad de estacionamiento en su interior, mediante la colocación de pilones retráctiles en la entrada de la plaza.

PROCESO. La propuesta prevé generar un espacio habitable en esta plaza situada en el centro del pueblo. Para ello propone su peatonalización, revitalización y la puesta en valor los elementos que la configuran.

Aunque la convocatoria de La Ciudad Amable apuesta por un enfoque multidisciplinar como fórmula para enriquecer las propuestas, dotándolas de un carácter transversal, en este proyecto este aspecto no ha sido contemplado, siendo arquitectos todos los componentes del equipo redactor.

A pesar de la importancia de la participación ciudadana en la iniciativa de La Ciudad Amable, el proyecto no hace referencia al proceso participativo seguido para la definición de sus actuaciones, ni se incluyen iniciativas de este tipo a desarrollar durante su ejecución o posteriormente, con su entrada en funcionamiento.

APORTACIONES. La liberación del espacio de la presencia del vehículo rodado propiciará la reducción de la contaminación acústica y atmosférica en un ámbito cuya accesibilidad estaba ya resuelta, favoreciendo su utilización para la estancia y el descanso de personas con distintas condiciones de movilidad y edad.

El proyecto no actúa sobre la vegetación, limitándose la intervención a la ampliación del alcorque del árbol central existente.

Se elige el chapado de piedra natural como material para revestir la fuente así como los paramentos verticales existentes y de nueva creación.

En general se mantiene el pavimento de hormigón pulido, presente en la plaza, o se repone para las pequeñas intervenciones.

CONCLUSIONES. La propuesta inicial para la convocatoria de la Ciudad Amable planteaba la necesidad de recuperar este espacio como lugar de encuentro para la ciudadanía, con posibilidad de acoger múltiples actividades.

Sin embargo, el proyecto finalmente desarrollado reduce su contenido a una recopilación de actuaciones de escasa entidad, ligadas básicamente al mantenimiento o “embellecimiento” del espacio.

Tras la ejecución de las obras se ha podido constatar que, pese a la provisión de pilones, la plaza se mantiene como un espacio de aparcamiento, al no haber entrado en funcionamiento estos elementos, ni impedir esta ocupación la autoridad pública correspondiente. Se pone por tanto en duda la necesidad real de la intervención y su vinculación con los objetivos de ejemplaridad previstos por la iniciativa de La Ciudad Amable.